Di todo lo que tengas que decirme, prometo que no te juzgare, eso fue lo que realmente nos hundió, ese buscar, eso que no nos deja expresar. Esperando en silencio, y enterrando también mis secretos.
Todo se llevó dejando un gran vacío, no buscamos la forma de reencontrarnos, sino que buscamos superarlo.
Que mis lágrimas caigan a la tierra, y caiga la vida misma, mi amor, es el infierno que mando los cuerpos, robando todo, robando sueños.